UNA MAÑANA CON PEPE DÁMASO. 3 de febrero de 2025.

A cada tema de conversación que tocamos Pepe le imprimía su dosis de vitalidad, de creatividad, como si cincelara las palabras.

A los amigos de bachpuccinithebealtes.com les pido que vean la «intromisión» de este artículo, en esta TARDE DE DOMINGO, como un escrito más entre los magníficos escritores que hacen el honor de participar en esta pagína, no por el escribidor sino por la importancia del entrevistado o visitado.

Agustín Santana, 09.02.2025

Hacer una visita a Pepe Dámaso en su casa de la Isleta es transportarte a otro espacio dentro del pequeño mundo de ese singular barrio y dentro del gran mundo que son las Islas Canarias.

Pepe nació en la Villa de Agaete el 9 de diciembre de 1933, hijo de Elvira y José Dámaso y en algún momento de su vida decidió montar su residencia fija en los alrededores del Puerto de La Luz, cerca del Castillo de La Luz (hoy Museo de su amigo Chirino) y de la Iglesia de la Luz, y no debe ser casualidad porque la Luz le ha acompañado durante toda su vida.

El lunes veinte y siete se abre la puerta de su casa y lo primero que veo son sus ojos, es Pepe el que abre, y siempre he dicho que tiene unos ojos pequeños muy llamativos, y su mirada curiosa y limpia atrapa la tuya dentro de la luz que desprenden emociones agradables.

La vitalidad de sus noventa y un años te levanta el ánimo y te empiezan las ganas de hablar, de saber, más que de hablar de que él hable, de escuchar lo que tiene que decir, mejor lo que quiere decir, porque cuando se sienta y te sientas todo es paz, serenidad, es como un compás de espera, como una preparación para la conversación, y en ese momento te saluda Jorge, su cuidador, que trae más paz a ese momento de entrada.

Empecé la conversación con una anécdota:

“Cuando publiqué mi artículo AGUSTIN SANTANA A PEPE DÁMASO el pasado día uno decía que hace muchos años, algo más de treinta, dejamos de trabajar en mi empresa Olympia Canarias las marcas Rotring y Talens y te entregué las pinturas y pinceles profesionales que tenía en stocks. Ese mismo día, mi colaborador de aquella época Juan Godoy, casualmente también de Agaete, gran persona a la que quiero mucho, me envía el siguiente whatsapp:

Buenos días Jefe, recuerdo los botitos de pintura que usted me mandó llevar a Pepe Dámaso a la calle Tauro. Me abrió una señora y él bajó de lo alto del patio con un mono de trabajo y envió saludos a toda la familia.”

Hablamos de Rotring, de César Manrique, del Galerista Manolo Ojeda, del Premio Montblanc a la Cultura en Canarias y hablamos de Las Palmas Acoge.

Pepe reivindica que de todos sus amigos él siempre ha vivido en Canarias. Manrique vivió varios años en Nueva York antes de regresar a Lanzarote, Chirino y Manolo Millares en Madrid. Y en todo el encuentro se palpa el sentido de vida Cósmico del Artista, su gran Espiritualidad reflejada en todo su cuerpo, en todos sus movimientos, en todas sus palabras. 

A cada tema de conversación que tocamos Pepe le imprimía su dosis de vitalidad, de creatividad, como si cincelara las palabras, te abre el oído para escuchar atentamente lo que está dibujando en el espacio tiempo de su salón, sus manos se mueven como si fuera creando en un lienzo imaginativo la idea que está proyectando, y la recibes con los ojos y los oídos atentos, porque no son solo palabras, son gestos de sus manos y de su cuerpo, miradas abiertas, hacia ti o hacia el cielo, como abriendo hacia la luz todas las posibilidades del tema.

Se centró mucho en Las Palmas Acoge, y no le faltaba razón. A finales de los ochenta y los noventa la inmigración comenzó a ser muy importante en Las Palmas de Gran Canaria, en su mayoría subsaharianos que huían de la miseria, del hambre, de la muerte, cuando llegaban a nuestra ciudad tenían que dormir en nuestras playas y en nuestras calles y no estábamos preparados para atenderles.

El Jesuita Fernando Motas me pidió, a mí y a un grupo de amigos, que trabajáramos para impulsar a Las Palmas Acoge que en esos momentos tenía una habitación en Cáritas de Escaleritas y contaba solo con dos personas. En 1994 alquilamos la primera sede en la calle Juan Rejón 29, en una casa muy bonita que acaba de ser derribada, que estaba en muy malas condiciones y que entre todos pintamos y preparamos.

Con el apoyo del Gobierno de Canarias y con mis contactos en la banca compramos la que sería la sede central en la calle Tecén, un año más tarde compramos una casa en la calle Tinguaro, abrimos en Arrecife de Lanzarote y en Vecindario.

Atendíamos a más de 18.000 inmigrantes cada año y ofrecíamos comidas, albergue, clases de español, atención médica, atención jurídica, defendíamos sus derechos, les promocionábamos para la integración en la sociedad.

Pepe Dámaso nos apoyó siempre que se lo pedíamos, Jerónimo Saavedra se interesó por nuestras instalaciones y estuvo un día con nosotros.

En el año 2003, por mis obligaciones profesionales, pasé la Presidencia a mi querido abogado y amigo Manolo Dévora. Años después, por la falta de interés y de apoyo de las autoridades públicas, tuvimos que cerrar Las Palmas Acoge. Hoy nuestras instalaciones de Tecén y de Tinguaro llevan cerradas varios años y estamos procediendo a liquidarlas para aportar todo su valor económico a otras Organizaciones No Gubernamentales actuales.

Pepe me anima a escribir un libro sobre la vida de Las Palmas Acoge y en realidad fue una obra magnífica que hizo un trabajo muy necesario, en un momento muy grave de nuestra ciudad, que influía en la vida de los vecinos y en la de los propios inmigrantes.

Durante los más de veinte años que servimos al fenómeno de la inmigración conseguimos atenderles con dignidad, formarles y introducirlos en nuestra sociedad preparados para trabajar, y otros para seguir su camino hacia la Península o hacia Europa.

Jorge, el hoy cuidador de Pepe, pasó por nuestras instalaciones, como tantísimos otros que se integraron y hoy viven y trabajan en nuestras islas.

Con Jorge y con una lámina que Pepe me dedicó.

Pepe hace un dibujo con cada visita que recibe como recuerdo de ese día. Dibujó lo que hoy podría ser el Logo de Las Palmas Acoge, nada más y nada menos que con el arte Dámaso.

Hablé con nuestro último Presidente Manolo Devora de la idea de Pepe Dámaso de escribir un libro sobre Las Palmas Acoge.

MIL GRACIAS PEPE.

PD: Cumplido tu deseo de visitar en El Hierro a tu amigo Amós y su bonito Hotel Ida Inés en La Frontera. Muy recomendable.

1 comentario en «UNA MAÑANA CON PEPE DÁMASO. 3 de febrero de 2025.»

  1. Otro artículo instructivo sobre tu vida y la de tu amigo pintor. Aprendí mucho sobre tu compromiso con el prójimo necesitado y también en esto reconozco tu compromiso con la honestidad y la búsqueda de una solución justa para el prójimo. ♥️

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