La fuerza pictórica de Sarah Miceli, siciliana afincada en Maspalomas. Por Maspalomas+

Publicado por MASPALOMAS+ | 22 Ago, 2024 | Cultura

Luz, color, claridad, intensidad y belleza son los hilos argumentales en todos y cada uno de los cuadros de la pintora

Por Juan de la Cruz

Sarah Miceli, natural de Cassibile, en el Común de Siracusa, Sicilia, es una joven enamorada, profundamente, de la vida. Desde muy joven se inició en la pintura, «por todo aquello cuanto transmite«, señala. Por lo que, entre sus numerosas aficiones, además de los paisajes, los pueblos, las costumbres y las esencias de su tierra siciliana, a la que lleva en el alma, se cuentan los rasgos paulatinos que emana de la creatividad de sus cuadros. Allá, en Sicilia, donde cuelga numerosas obras, a pesar de su juventud, y aquí en Maspalomas, un rincón que la llena de vida, y que, desde que la pisó por primera vez y la conoció se quedó prendado de ella.

Sarah es una joven dinámica, que se esfuerza en aprender idiomas, como fuente de entendimiento con todos, que gusta de su trabajo, que pinta en los ratos libres, con esa magia y hechizo que le concedió la naturaleza, en el deseo de transmitir todo el sentimiento que atesora en la capacidad expresiva de su pintura. Cuando encuentra un hueco, en medio de sus quehaceres habituales, y con el sueño y la imaginación de plasmar en el lienzo esas imágenes que recrea, saboreando su soledad y los rasgos que enriquecen los lienzos de su expresión.

La fuerza rítmica y expresiva de Sarah Miceli

La joven pintora siciliana, cada vez que se sienta con tranquilidad para alcanzar el final de la obra, se vuelca a caballo entre la riqueza de la soledad, con un fondo musical, y su propia entrega de manejar el hechizo de la fuerza que le nace en el alma, que le da vida y que se manifiesta en ese conjunto de sensaciones que expresa en la obra.

Comunicar la sensibilidad de la pintura

Cuando se habla con Sarah Miceli, contemplando un desfile de cuadros firmados por ella, sobre el sentimiento de su obra, responde que se vuelca, sobre todo y fundamentalmente, «en comunicar con la mejor manifestación de los pinceles el pensamiento de la estampa, del cuadro que tengo in mente, y trasladar a los demás y a mí misma, toda la fuerza que deseo manifestar con mis cuadros«.

Y es que Sarah, cuando se retira en lo profundo de su interior, y se pone a llevar al lienzo la recreación de las imágenes y estampas, lo hace con una fuerza emocional intensa, volcándose en el espacio de sus luces, de sus pinceladas, de cada segmento del cuadro, que, a medida que pasa el tiempo, toma el pulso real de su sueño y de su idealización.

A través del color, de la luz, de la imágenes, de las pinceladas, de las tonalidades, hasta que alcanza a saborear la alegría intensa, consigo misma, desde una realización personal de una obra que hemos de calificar genuinamente hermosa y sensible, bella y serena, con la tonalidad que le brota en los adentros.

Sarah Micheli

Sarah contempla sus cuadros

Cuando la pintora y artista da por terminado el cuadro siente la sensación del descanso ante la obra, analiza las sensaciones que le transmite y comunica su pintura, busca el análisis contemplativo e intelectual que tanto embellecen sus cuadros…

Se aleja, se acerca, se recrea, fija la mirada, incluso de forma crítica, en la obra y con la obra, y se queda satisfecha con esa expresión que le facilita el haber aprendido a pintar gracias, también, al ánimo que le inferían sus profesores,,,

Gracias a todo ello Sarah, que lamente no tener más tiempo libre para pintar, manifestando que «se me pasa el tiempo volando. Menos mal que esta bendita tierra de Maspalomas influye mucho con su alegría, con su luz, con clima y con su fuerza sobre todos nosotros. A mí, al menos, personalmente, Maspalomas me imprime mucho ritmo, mucha alegría, muchas ganas de vivir…«

¿La primera exposición?

Algunas veces sueña con ver expuesta su obra en alguna galería. Lo que, a la vista de su trabajo y la consonancia de su fuerza y seguridad pictórica, tal pueda ser una pronta realidad. Y apunta: «La verdad es que, a pesar de la impresión y de timidez que me produce la exposición y la manifestación pública de mis pinturas, de mis lienzos, de mis cuadros, de lo que trato de comunicar en todos y cada uno de ellos, la verdad, te señalaba, es que tengo ganas de exponer este conjunto de obras y algunas otras, a través de las diferentes etapas, como una forma artística de comunicarse con la sociedad…«

La obra de Sarah se caracteriza por la luminosidad, por la luz, por la alegría que traslada su obra, y, sobre todo, conociendo a la autora, porque se vuelca de modo literal e intelectual en la poesía armonizada de todas y cada una de sus obras…

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