
EL TEIDE, impresionante símbolo de Tenerife y de Canarias
Faro de marinos y científicos del siglo de las colonias. (Fundación Canaria Orotava de Historia de la Ciencia) :
El descubrimiento científico de las Isla Canarias lo propició el auge de los viajes de expansión geográfica y colonial de las potencias europeas hacia tierras cada vez más lejanas. Los pasos y estancias en el Archipiélago trajeron las primeras impresiones en el terreno de la botánica, la admiración por el Teide y la mitología expandida por navegantes y viajeros. A partir del siglo XVI Tenerife se convirtió en puerto y parada para marinos, expedicionarios y científicos. Antes del siglo XVIII hay referencias al Teide como la montaña más alta del mundo, el temible volcán. En 1679 Robert Hooke pasa unos días en la isla y expone su hipótesis de que la formación de las Islas Canarias se debe a erupciones submarinas que propician la creación de la cima más alta de la tierra. En 1771 Jean Charles Borda pasa 12 días en la isla y realiza la medición más exacta del Pico en 3.712,80 metros. Numerosas expediciones de ingleses y franceses se produjeron después de la conquista de Canarias por la Corona de Castilla a lo largo del siglo XV, descubriendo y incorporando a las cartas náuticas de navegación al punto más alejado conocido.