Nuevo artículo de opinión del querido Néstor Doreste. Seguimos esperando sus interesantes opiniones nacidas siempre de su gran corazón. Inteligentes y razonadas. Gracias Néstor, aquí tienes tu página. La primera que abrimos a alguien de fuera.
Néstor Doreste Paduilla, 28.11.2023
Me hace una triste gracia esa frase de «siendo comunista». Todavía hay personas que creen que serlo es como el coco que se come a los niños.
No entienden en su fanatismo histórico que hay comunistas tan serios y honrados como ellos. Los comunistas son personas totalmente normales que saben analizar y opinar con autoridad sin dejar que intervenga su ideología.
Yo creo que esas personas en el fondo no son demócratas porque desprecian a las otras ideas. Decir «siendo comunista» retrata a un posible casi fanático nostálgico que no sabe que lo es.
Así no se progresa. Si no actúa la inteligencia, mal asunto.
Siempre el pasado. Mirar para atrás, muchas veces es malo. Sobre todo si se hace guiado por una única idea.
Desde luego, el discurso es estupendo, pero lo es porque hay comunistas estupendos, exactamente igual que los hay entre los que no son comunistas.
Agustín Santana, en respuesta:
Tus palabras me recuerdan a Agustín Millares Sall y a Pedro Lezcano y a Julio Anguita, maravillosas personas. Muy de acuerdo contigo.
El problema que tenemos en España es que se les hace a los comunistas en general y también a los de derechas.
El apartheid que comenzó Pedro Sánchez en su investidura, acordando con veinte o veinte y cinco partidos, de toda condición, comunistas, socialistas, idependentistas, exterroristas, entre los que hay partidos muy de derechas, todos a una, atacando a la derecha española para dejarla fuera del espacio político fue un ataque premeditado a la democracia, a la participación, de los tuyos, y de los otros.
Ahora mismo en España vivimos la división perfecta para los que no quieren la democracia.
Termino: Gracias querido Néstor por hacernos pensar y reflexionar, en armonía, sin divisiones, respetando todas las opiniones.